“¿Por qué no me deja ver su teléfono? Seguro me engaña”. Eso es lo que la gran mayoría piensa cuando su pareja conserva su privacidad.
Ya lo hemos mencionado: las redes sociales, en algunos casos, han venido a causarnos mucho más estrés que el que ya cargábamos antes. Pasamos mucho más pendientes de nuestro teléfono y de las notificaciones que puedan caer en él, porque para nosotros se convierten en órdenes.
Las redes sociales se han entrometido en todo, incluso en nuestra relación como pareja. Vivimos en medio en una temporada donde un chat, un tuit, un like o una foto pueden ser el origen de muchas rupturas.
Según una encuesta hecha por el sitio web Match.com, el 48 % de las parejas considera que las redes sociales originan que la relación termine. ¿Cuál es uno de los principales argumentos? Uno de los dos cree que la otra persona le oculta algo en sus redes sociales.
¿Hasta qué punto es permitido “mostrarnos al mundo”? ¿Es cierto que porque yo no haga tan pública mi relación le estoy ocultando algo a mi pareja? ¿Es malo que siga conservando la privacidad de mis redes frente a mi pareja?
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Ahora queremos darte unos pequeños consejos, para que, en medio de este mundo globalizado, tú y tu “media naranja” no tengan malos entendidos y siempre prevalezca la confianza.
- Hablar. Puede que resulte algo trillado, pero es que de verdad funciona. Siéntense y platiquen calmados de lo que sienten, no es malo; confiesen qué es lo que sienten y lo que les hace sentir incómodos. Solo de esta forma podrá imponerse la confianza entre ambos.
- Timidez. Parece complicado de creer, pero hay personas que por diferentes causas prefieren reservar su vida social o de pareja. ¿Qué tal si tu pareja a la que tanto le has reclamado es así?
- Cariñómetro. Ten claro que las publicaciones que hace en sus redes sociales no son directamente proporcionales al cariño que siente por ti, las redes sociales sirven para que las personas se comuniquen no para medir cantidad de amor.
- Paranoia. Últimamente nos inventamos toda una novela cuando vemos que nuestra pareja le da un like a ese “amiguito o amiguita”. Eso es lo primero que hay que evitar, ambos pueden conservar sus amistades, siempre y cuando se den su lugar y respeten la relación que sostienen.
Fuente: www.vidasana.sv